Si tu gran ilusión es viajar, conocer diferentes culturas, relacionarte con la gente, observar otras formas de ver la vida… posiblemente podría interesarte formar parte del personal que se dedica a la aeronáutica, al transporte aéreo, optar a poder trabajar o formar parte de la plantilla de una compañía aérea, para ello una de las fórmulas a tener en cuenta son las diferentes opciones o estudios que se pueden realizar para encontrar un hueco dentro de este sector actualmente tan demandado:
- Piloto de aviación comercial y operaciones aéreas. Esta titulación se corresponde con un grado universitario, por lo que hay que valorar que se trata, como mínimo de una carrera de 4 años de duración, en los cuales además de estudiar asignaturas como física, matemáticas o aeronáutica se realizará también una formación práctica que comprende tanto simulaciones de vuelo como prácticas de vuelo real. Con esta titulación se puede acceder a trabajar como piloto comercial de líneas aéreas, director de operaciones aéreas, ingeniero de vuelo, etc.
- Piloto privado. La formación de esta titulación consta de 100 horas lectivas y 45 horas de formación práctica de vuelo. La superación de este curso autoriza y otorga a sus poseedores licencia para la realización de vuelos deportivos, de ocio o ser copiloto de un vuelo que no tenga fines comerciales.
- Piloto comercial. Para el acceso a esta titulación es condición indispensable contar con la licencia de piloto privado y al menos 150 horas de vuelo. Su posesión habilita para ser piloto de aviones de un solo motor, piloto de avión no comercial o copiloto en transporte aéreo comercial.
- Tripulante de cabina de pasajeros (TCP). Esta es necesaria para acceder a la profesión más conocida popularmente como azafata/o de vuelo o auxiliar de vuelo. Es un perfil profesional importante por la gran influencia que tiene en el buen y correcto funcionamiento de un vuelo con pasajeros, ya que su función principal es proporcionar un servicio de confianza, cercanía, calidad y comodidad a los pasajeros, así como el mantenimiento, el control y la vigilancia de la seguridad durante todo el trayecto que dure el vuelo, además de garantizar la seguridad de los pasajeros, por lo que ante cualquier imprevisto, adversidad o emergencia en un vuelo deben estar preparados y en posesión de todos los conocimientos necesarios, así como contar con la capacidad de reacción suficiente para afrontar cualquier contratiempo o percance que se produzca. Por otro lado, representan la cara amable, así como la imagen de la compañía de la cual forman parte frente a sus clientes o pasajeros. Es por ello que si te apasiona este mundo, nosotros te recomendamos que te formen en la Escola Universitària Formatic Barcelona, una institución educativa privada fundada en 1974 que ha sido la pionera como la primera escuela de azafatas de tierra y vuelo en Barcelona, sus estudiantes son formados por instructores de TCP, que al mismo tiempo son tripulantes de cabina y pilotos, lo que les permite dar a conocer a sus alumnos el mundo de la aviación de primera mano.
Los requisitos para acceder al curso que habilita para obtener el TCP son:
– Ser mayor de edad.
– Poseer una estatura mínima de 1,60m. para las mujeres y 1,70m. para los hombres.
-Estar en posesión del certificado oficial de la ESO.
– Poder cubrir a nado una distancia de 100m. y realización de prácticas de salvamento en medio acuático.
-Superación de un reconocimiento médico aeronáutico específico.
-Idiomas. Actualmente el inglés es el idioma universal y comercial por excelencia, por lo que su dominio será necesario y obligatorio.
A los alumnos que hayan superado este curso la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), Organismo dependiente del Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana, emitirá un certificado oficial que los acreditará para ejercer como Tripulante de Cabina de Pasajeros.
Operador de drones
Otra titulación que tiene en cierto modo relación con el espacio aéreo, pero realizado desde tierra es la de operador de drones. Cada vez estamos más acostumbrados y se utilizan más estos nuevos aparatos, tanto de manera profesional como recreativa, en zonas urbanas o en vuelos nocturnos, por lo que es una profesión es auge y con un gran futuro por delante, tanto que el gobierno consideró necesario regular su uso mediante el Real Decreto 1036/2017, de 15 de diciembre, por el que se regula la utilización civil de las aeronaves pilotadas por control remoto, en el que se especifica que para pilotar de manera profesional un dron es necesario contar con la licencia y estar dado de alta como operador de drones en la Agencia Estatal de Seguridad Aérea.