La construcción ha sido uno de los negocios que le ha dado mucha vida a la economía española en las últimas décadas. Nos hemos dedicado a levantar edificios por diversas razones, entre las cuales se sitúan la llegada de una cantidad masiva de gente a las grandes ciudades y al desarrollo del turismo. Esto ha transformado la realidad en la que nos movemos, a la que nos hemos tenido que adaptar. Eso, en España, ha equivalido a crear nuevos lugares para dar cabida a los turistas y todas esas personas que se han desplazado a vivir en una gran ciudad.
Como consecuencia, España ha tenido una gran cantidad de profesionales ligados al mundo de la albañilería. Esto cambió cuando, en torno al año 2007, llegó una de las grandes crisis económicas que ha experimentado la Historia de la Humanidad. Fue la peor desde el crack de 1929 y, además, fue una crisis que tuvo mucho que ver con el sector inmobiliario. España sufrió las consecuencias de esa crisis y todos y todas sabemos que eso terminó dejando una cifra del paro superior a los cinco millones de personas. Fue una verdadera desgracia, qué duda cabe.
Ahora, España necesita a los albañiles. Según una noticia publicada en la página web del canal de televisión Telemadrid, a nuestro país le hacían falta 700.000 albañiles. Es una cifra demasiado alta y que pone en evidencia que mucha gente salió escaldada de un sector que era de los más interesantes para ganar dinero pero cuya realidad cambió por completo con la llegada de esa crisis. Ni que decir tiene que esa realidad ha cambiado por completo y que se parece más a la que existía antes de la crisis del ladrillo. Y es que la construcción vuelve a ser un sector elemental para la economía española.
La noticia de La Sexta que os vamos a enlazar en este párrafo va en la misma dirección que la que ya hemos analizado. Se comentaba que hacía falta mano de obra calificada en este sector ante la llegada de un nuevo boom inmobiliario. Y es que ahora, en nuestro país, toca invertir en un sector que, además de construir, también tiene una nueva labor igual de importante, que no es otra que la de rehabilitar los edificios ya construidos hace décadas. Y son muchos los inmuebles a los que esa necesidad ya les está acuciando.
Por suerte, la tecnología se ha implementado en los últimos años dentro del sector de la construcción… para beneficio de la seguridad de las personas que se dedican a levantarlos. Las líneas de vida y los sistemas de seguridad se han implementado una auténtica barbaridad y eso contribuye, como indican diferentes informes elaborados por Traltur, a que se haya potenciado la eficiencia de los trabajos de construcción de edificios, lo cual contribuye a que el sector se encuentre en un estado de forma como el que no se recordaba desde hacía demasiado tiempo.
Sigue disminuyendo el número de accidentes en obras
Uno de los puntos débiles que el sector de la construcción ha tenido siempre ha sido el relacionado con la seguridad. Los sistemas y los equipos de protección se han hecho más seguros y han permitido que la siniestralidad se reduzca. La mejora en las líneas de vida y también en la formación en materia de seguridad en altura se han erigido en las principales responsables de que, ahora, todo lo que tenga que ver con la construcción sea más seguro que en ningún otro momento de la Historia.
Obviamente, siempre que la tecnología nos ofrezca la oportunidad de mejorar, hay que seguir haciéndolo. La legislación española se ha convertido en una de las más exigentes del mundo en este sentido y eso es lo que ha hecho que las empresas de construcción de este país se hayan puesto manos a la obra para intentar conseguir que esa protección de los obreros sea eficaz y cumpla con el objetivo que con ella se persigue. Desde luego, tenemos los medios para conseguir lo que nos hemos propuesto en este sentido y es evidente que no podemos esperar otra cosa que no sea garantizar la mayor de las seguridades.
Se han puesto los cimientos para que la profesión de albañil deje de ser vista como una de las más peligrosas de todas cuantas existen. Ahora, la seguridad en este sentido se ha implementado y eso es lo que puede dar lugar a que esa demanda de albañiles en España se vea satisfecha. Porque ya sabéis que, si no contamos con la cantidad de profesionales a los que antes hacíamos referencia, será mucho más difícil que se tenga la posibilidad de mantener al sector de la construcción entre los mejores de la economía de este país.