El método curly para unos rizos perfectos

Cada día hay que aprender algo nuevo. A veces eso algo nuevo que te toca aprender, solo es novedoso para ti. Otros ya lo conocen o tienen bien asimilado el concepto. De esta manera se propaga el conocimiento, de los que saben a los que no y, viceversa. A título personal, nunca dejo de aprender y de sorprenderme con las cosas que se pueden aprender en esta vida sin sospecharlo. Mientras que yo pensaba inocentemente que el cabello rizado tenía las mismas necesidades que el cabello liso, me doy cuenta de mi error en un nuevo aprendizaje: las necesidades particulares de cada tipo de cabello. En este caso, hablaremos del cabello rizado.  

Esta curiosidad de adentrarme en el universo de los rizos perfectos y como mantener una melena leonina espectacular, me ha surgido visitando una página web de forma casual. En Curly Store ofrecen todo tipo de productos relacionados con el método curly. Pero ¿Qué es el método curly? Eso es justo lo que vamos a aprender en este artículo. Probablemente haya muchos y muchas lectores y lectoras familiarizados con el tema, pero también habrá otros que no lo estén y como yo, quieran estarlo.

El método Curly Girl, CG o chica rizada, es una técnica desarrollada para aportar y mantener un alto nivel de hidratación en el cabello, con la finalidad de conseguir unos rizos definidos, naturales y libres de encrespamiento. La ejecución del método consiste en hacer una serie de cambios en los hábitos de la rutina de cuidados por un régimen ideado en exclusiva para los cabellos rizados, al margen de los champús con sulfatos. Algo que hay que destacar sobre el método curly es que se ha demostrado que los resultados de aplicar esta técnica son positivos, siempre y cuando se sigan correctamente los pasos necesarios y utilizar los productos adecuados.

Curly hair, fruto de una necesidad

El método curly, surge de la mano de una estilista que ideó un procedimiento ideal para lucir esos rizos perfectos, con volumen y sanos. Diseñado para el pelo rizado u ondulado, el método curly nació para solventar una necesidad: dominar los cabellos rizados más rebeldes.

Todos sabemos que los cabellos rizados son más difíciles de mantener, se dañan con facilidad si no se mantienen sus cuidados y fácilmente lucen encrespados y a su libre albedrío. Sin embargo, con el método curly, todo esto cambia radicalmente, basando los cuidados del cabello en la hidratación para evitar la sequedad y prevenir el encrespamiento, logrando unos resultados perfectos. La creadora de esta tendencia, explica detalladamente el paso a paso que hay que seguir para lograr los resultados pretendidos. Se trata de un tratamiento que deber realizarse de manera gradual, con paciencia y constancia para que el cabello utilice su memoria y capacidades proporcionando unos resultados naturales y duraderos.

Una de las peculiaridades del método curly, es que se descartan totalmente los champús con sulfatos, siliconas o cualquier sustancia que dañe la salud del cabello rizado y la definición del rizo. Esta práctica, sigue un proceso que consta de una rutina que se realiza en tres pasos: la preparación previa, el lavado y el peinado. Para una gran mayoría, esto supone un cambio que invita a olvidar su rutina anterior, aunque los productos pueden cambiarse de forma paulatina.

Las cuatro reglas de oro que deben cumplirse para realizar el método curly se basan en corregir una serie de malos hábitos en lo que a nuestra melena respecta. Para introducir el método curly dentro de la rutina capilar es fundamental saber lo que hay que hacer, pero también lo que no hay que hacer. Sin darnos cuenta, adoptamos hábitos dañinos para la salud del cabello rizado, como utilizar productos que producen el efecto contrario al deseado.

Esas cuatro reglas que hay que cumplir son las siguientes:

  • El método curly es un tratamiento de hidratación intensivo a seguir durante tres semanas. El cabello se trabaja de forma gradual, para permitir que se adapte al cambio y el resultado perdure.
  • No utilizar champús con sulfatos, parabenos, alcoholes y siliconas que pueden ser muy agresivos para el cabello.
  • Sanear las puntas antes de empezar a aplicar el método curly.
  • Descartar el uso de cepillos, la mejor opción es utilizar los dedos o peines de púas gruesas con el pelo todavía mojado.

Evidentemente, para lograr un tratamiento efectivo, es necesario disponer y utilizar los productos correctos. En primer lugar, es necesario un producto que limpie a fondo las fibras capilares y las desintoxique. Tras este tratamiento de exfoliación, hay que aplicar un producto elaborado a base de aceites minerales para hidratarlo. Para mantener el cabello el champú y el acondicionador, deben estar adaptados al método curly. Utilizar un producto curly girl que ayude a manejar los rizos sin necesidad de peine, como potenciadores que definan el rizo.

Paso a paso del método curly

Logra un resultado efectivo con la aplicación del método curly implica realizar tres sencillos pasos. No por ser sencillos deben descuidarse o saltarse ninguno de ellos. Según su creadora, la siguiente rutina para la preparación, el lavado y el peinado, dan como resultado una melena rizada de impresión.

La preparación, el primer paso. El objetivo primero del método curly es someter al pelo y el cuero cabelludo a una limpieza profunda que elimine por completo las impurezas de la zona. Para lograrlo, hay que utilizar un tratamiento détox que arrastre las células muertas, resto de productos de peluquería, polución o cualquier residuo que se encuentre presente el cabello y el cuero cabelludo. Esto se logra con tratamientos específicos desarrollados a tal fin, aplicándose de medio a puntas sobre el cabello mojado y enjuagando con agua caliente para eliminar con mayor facilidad los residuos. Es importante no recurrir posteriormente a productos que contengan siliconas al menos durante los diez días siguientes a su aplicación. En el caso contrario sería como si no se hubiera realizado un tratamiento détox. El peeling capilar es un proceso muy agresivo por lo que conviene aplicar una vez a la semana un mínimo de aceite con las manos.

El segundo paso, lavado. Para mantener la limpieza profunda previa, hay que hacer uso de un champú y un acondicionador que cumpla con las reglas de oro del método curly. Recordamos nuevamente que se descartan champús con sulfatos, alcoholes, siliconas o cualquier tipo de sustancia dañina para el cabello rizado. Un champú que nutra, fortalezca y aporte un extra de hidratación, formulado con ingredientes cien por cien naturales, es lo más adecuado para no repercutir en el proceso de exfoliación capilar previamente realizado.

En el momento de aplicar el champú en el cabello, el lavado deber realizarse  solamente en las raíces del mismo con un masaje suave sobre el cuero cabelludo. Tras el masaje, hay que enjuagar con abundante agua para poder aplicar el acondicionador. Al contrario de lo que sucede con el champú, el acondicionador debe repartirse de la raíz a las puntas, eliminando el exceso poco a poco. De esta manera se permite al pelo absorber todos los nutrientes. Este proceso, cuando se lava el pelo, debe realizarse una vez a la semana.

Último paso, el peinado. Los cepillos están totalmente prohibidos en el método curly, por lo tanto, es necesario utilizar un producto que ayude a manejar el cabello con facilidad utilizando los dedos o un peine de púas gruesas. Productos que sellen la hidratación y posean propiedades antioxidantes ayudan a revitalizar los rizos. Para aplicar este tipo de productos que facilitan el peinado, hay que hacerlo por secciones, aplicándolo con una toalla que permita apretar el pelo contra la crema. Es aconsejable no secar el pelo con secador pues de esta manera se resecan los rizos.

Rizos no hay solo uno. Existen diferentes tipos: más pequeños, más grandes, ondulados suaves, rizos apretados… el método curly, ha demostrado ser efectivo con independencia del tipo de rizo, siempre y cuando se sigan los pasos de la manera correcta. Es sencillo, pues para empezar solo hay que cambiar los productos utilizados para el cabello, abandonando los químicos agresivos. Así cuidamos la melena hasta el punto de conocer cuál es su estado natural. Adaptar esta sencilla rutina es importante para adoptar el método curly.

Sin embargo, tan importante o más es saber qué tipo de productos son los adecuados para realizar el método curly. Como todo hábito a abandonar y a implementar, es necesario pasar por un período de adaptación. Una de las ventajas que ofrece este método en detrimento de otros es que la técnica pueda aplicarse de manera gradual y aun así, ofrecer resultados bastante buenos.

Ahora ya lo sabes, si tienes una melena rizada y salvaje con la que no sabes que hacer o cómo lidiar, el método curly es la solución. Basta con seguir los pasos básicos e implementar una rutina de cuidados capilares basados en la hidratación para mantener tu melena en perfecto estado y poder dominarla a tu antojo. Nada de cepillos para controlar los rizos, el producto adecuado y los dedos son la mejor manera de colocar cada mechón en su lugar, lucir un peinado de diez y una melena, espectacular.

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